Recuento de los días que se perdieron en el blog
El domingo me la pasé semi dormido, me sentía muy débil, más débil que el sábado. Ahí me pegó feo el haber donado sangre. En la noche, Alejandro (A.K.A. el Hippie) me avisó que había fiesta en Cuernavaca, por el cumpleaños de Edgar (A.K.A. el Maizoro), ellos dos son ex compañeros del cine, ambos abrieron el cine y son buenos camaradas. El lunes me levanté temprano para llegar, e hicimos un largo viaje, todo por las escalas. Como tres horas del D.F. a Cuernavaca, pero, estuvo divertido el viaje, estuvo divertido.
Al llegar, entramos a una casa que aún está siendo construída. Unos amigos del Maizoro compraron el terreno, y ya van avanzados. Tienen alberca, no muy profunda, pero la tienen. Estuvimos un buen rato con la desidía de meternos al agua, debido que está helada el agua, y el clima no favorecía mucho, pero, al final de cuentas, TODOS entramos al agua.
Comimos bisteces, que fueron preparados por el Hippie, Mapi y Jaqui, estaban buenos, sólo que la carne no era MUY buena. Por verles cara del citadinos les vendieron de la carne más pitera. Malditos provincianos, si nuestras máquinas voladoras no son tan malas.
Después de la comida, hubo un rato de cotorreo... para después ver como los amigos del Maizoro le aventaban a la alberca. Para verse solidarios con él, sus compas agarraron a Mijael y lo aventaron a la alberca. El siguiente en caer fue el Hippie. Eso me preocupó bastante, yo era el hombre que faltaba por ser arrojado al agua. ¿Qué podía hacer, qué podía hacer? Mapi y Jaqui estaban en un convertible, así que me metí ahí, esperando que no me hicieran nada. Quitaron la capota... y puse resistencia. Unos dos minutos, cuando ya lo ví perdido y/o que habría heridos, les pedí que me dejaran despojarme de mi camisa y chanclas.
Fui arrojado como un vil costal de papas, y luego siguieron las chicas. De una forma enferma arrojaron a Jaqui, luego a Mapi y a la chica del Maizoro. Cayeron feamente estando ellas con ropa "normal".
Siguió, por último, Marianita, y, bueno, los mismos compas del Maizoro. Debo admitir que me dio miedo que me arrojaran, no sé nadar.
Después de la mojada (como a las siete de la noche) y una pequeña bailada (no sé bailar, no sé nada, maldita sea, ¿qué es lo que sé?), salimos a dar una vuelta por el lugar, para dar el grito.
Es impresionante como la gente de provincia odia a los del D.F. No sé qué les hicimos, y no me importa, pero si que nos veían con odio. En fin, estuvimos un rato en la plaza del lugar, pero ya habían dado el grito. El animador que llevaron era realmente malo, sin contar la música que ponían... er... dicen ser patrios y ponían electro, reaggetton y demás, no sé, no va xD.
Después de eso fuimos a comer unas quesadillitias de pollo... o pollo (chiste local del momento xD). Hubo plática, carrerita de coches, y, al final, juego de dominó. Gané bastantes, aunque cabe descatar que un niño cerró dos juegos. Maldito. Como se me adelantaron a escoger lugar para dormir (no hay aún muchas camas en la casa), me tocó en una cama sin colchón. Fue, de alguna u otra manera, cómodo, hasta que cantó el gallo. Puto gallo.
Salimos, y yo tenía cara de dopado. Sí, el gallo no me dejó dormir bien. Tuvimos un pequeño desayuno en Tres Marías, y de ahí, pa'l D.F.
Eso fue todo el viaje que hice para dar el grito. Fue mejor de lo que había planeado para esos días.
Hoy volví de la escuela sin haber tenido clases, me quedé dormido mucho tiempo, y, bueno, heme aquí, escribiendo la entry.
Tengo ganas de comer algo.
Se me olvidó algo importante. Recibí cientos y cientos de mensajes al hi5, pero uno me llamó la atención, más porque no lo pude ver (me llegó la notificación al mail, pero no lo veo en mi hi5), y es uno de Benjamín. ¿Se te ofrece algo o sólo es una cadena del hi5? Da igual, puedes dejar el recado por aquí.
Al llegar, entramos a una casa que aún está siendo construída. Unos amigos del Maizoro compraron el terreno, y ya van avanzados. Tienen alberca, no muy profunda, pero la tienen. Estuvimos un buen rato con la desidía de meternos al agua, debido que está helada el agua, y el clima no favorecía mucho, pero, al final de cuentas, TODOS entramos al agua.
Comimos bisteces, que fueron preparados por el Hippie, Mapi y Jaqui, estaban buenos, sólo que la carne no era MUY buena. Por verles cara del citadinos les vendieron de la carne más pitera. Malditos provincianos, si nuestras máquinas voladoras no son tan malas.
Después de la comida, hubo un rato de cotorreo... para después ver como los amigos del Maizoro le aventaban a la alberca. Para verse solidarios con él, sus compas agarraron a Mijael y lo aventaron a la alberca. El siguiente en caer fue el Hippie. Eso me preocupó bastante, yo era el hombre que faltaba por ser arrojado al agua. ¿Qué podía hacer, qué podía hacer? Mapi y Jaqui estaban en un convertible, así que me metí ahí, esperando que no me hicieran nada. Quitaron la capota... y puse resistencia. Unos dos minutos, cuando ya lo ví perdido y/o que habría heridos, les pedí que me dejaran despojarme de mi camisa y chanclas.
Fui arrojado como un vil costal de papas, y luego siguieron las chicas. De una forma enferma arrojaron a Jaqui, luego a Mapi y a la chica del Maizoro. Cayeron feamente estando ellas con ropa "normal".
Siguió, por último, Marianita, y, bueno, los mismos compas del Maizoro. Debo admitir que me dio miedo que me arrojaran, no sé nadar.
Después de la mojada (como a las siete de la noche) y una pequeña bailada (no sé bailar, no sé nada, maldita sea, ¿qué es lo que sé?), salimos a dar una vuelta por el lugar, para dar el grito.
Es impresionante como la gente de provincia odia a los del D.F. No sé qué les hicimos, y no me importa, pero si que nos veían con odio. En fin, estuvimos un rato en la plaza del lugar, pero ya habían dado el grito. El animador que llevaron era realmente malo, sin contar la música que ponían... er... dicen ser patrios y ponían electro, reaggetton y demás, no sé, no va xD.
Después de eso fuimos a comer unas quesadillitias de pollo... o pollo (chiste local del momento xD). Hubo plática, carrerita de coches, y, al final, juego de dominó. Gané bastantes, aunque cabe descatar que un niño cerró dos juegos. Maldito. Como se me adelantaron a escoger lugar para dormir (no hay aún muchas camas en la casa), me tocó en una cama sin colchón. Fue, de alguna u otra manera, cómodo, hasta que cantó el gallo. Puto gallo.
Salimos, y yo tenía cara de dopado. Sí, el gallo no me dejó dormir bien. Tuvimos un pequeño desayuno en Tres Marías, y de ahí, pa'l D.F.
Eso fue todo el viaje que hice para dar el grito. Fue mejor de lo que había planeado para esos días.
Hoy volví de la escuela sin haber tenido clases, me quedé dormido mucho tiempo, y, bueno, heme aquí, escribiendo la entry.
Tengo ganas de comer algo.
Se me olvidó algo importante. Recibí cientos y cientos de mensajes al hi5, pero uno me llamó la atención, más porque no lo pude ver (me llegó la notificación al mail, pero no lo veo en mi hi5), y es uno de Benjamín. ¿Se te ofrece algo o sólo es una cadena del hi5? Da igual, puedes dejar el recado por aquí.
4 Comentarios:
"hasta que cantó el gallo. Puto gallo."
Epic xD
Aún tengo tu juego de pokémon -.-
No es divertido que te despierte un gallo a las tres de la mañana.
Le hubieras lanzado cruelmente un zapato, claro, antes de eso debías buscarlo.
Hi5...me llegan mensajitos de esos a mi correo de gente que no conozco y ni siquiera tengo hi5.
"Es impresionante como la gente de provincia odia a los del D.F"
OMG el chilango nos descubrio!! ... ok no pura cura xD!
Ese gallo es compa mio, somos de la misma granja xD
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