Y que así sea...

Y que así sea, con tristeza carcomiendo mi ser y demencia arrastrando mi pensar, sumergiéndome en el mar de lágrimas, bebiendo de la copa de la amargura y derramando dolor en el valle de la soledad.
Es lo más que puedo decir, darle tiempo al tiempo mi único pensar, y dejar de pensar mi único sentir. No pienses en mi dolor, cuando tú tienes uno más grande, y no puedes siquiera cargar con él. No pienes en mis lágrimas, cuando tú derramaste un mar a tus pies y te estás ahogando en él. No pienses en mi constante sufrimiento y sangrar, cuando tú te estás muriendo por las heridas profundas que tienes y te encuentras cubierta con tu propia sangre. No pienes nada en mí, y sólo piensa en tus sentimientos.
Trata de ser feilz, y no huyas de la vida.
En verdad, no sé cómo decirte lo que siento, y cómo expresar lo que me pasa. Tengo ganas de vomitar y llorar, pero no puedo hacer ninguna.
Pasé del cañón del dolor al bosque de la pateticidad, y ahora una figura sombría se burla de mí. ¿Sabes qué es lo peor? Esa figura soy yo.
No puedo hacer nada más que sentir el dolor intenso, y pensar en cómo soportarlo.
La agonía en la que me he sumergido es nueva, y ahora me encuentro sobre nuevos horizontes. Darle tiempo al tiempo mi único pensar, y dejar de pensar mi único sentir.
¿En verdad es confusa mi estúpida (y mala) poesía?
Todo lo escrito es para ti. No tengo el valor de decirlo siquiera por aquí, aunque ya lo sabes. Te lo dije, tengo miedo, mucho miedo. Hasta luego, buena suerte. Yo aquí estaré bien.


Creo que yo soy de las personas que tienden a sufrir el síndrome del Puerco espín. Y generalmente me relaciono con personas que sufren de lo mismo. ¿Por qué sólo he podido conocer a las mejores chicas de esa manera? No lo sé, no lo sé.
Recuérdalo, Vale, you're my wonderwall, lo digo en serio, no puedo mentir o me quedo calvo.
Be happy, no te preocupes por mí.