De fantasmas y borracheras

Antier en la mañana me puse a escuchar un programa del Intenso Gudinni. Habló sobre la Llorona, y ps como que si me temblaron un pco las nalguitas al escucharlo tan de la mañana. Después de eso, me puse a platicar un rato con mi papá sobre fantasmas y esas cosas. Les seré franco, yo no he visto a ninguno, ni quiero, la verdad me moriría del susto al ver uno. Pero si he sentido y escuchado cosas que no se pueden explicar con un simple "fue el gato" (por decir algo). En cambio, mi papá si tiene aquel "don" que no sé si se pueda llamar don) para ver más allá de lo evidente (si, sonó mamón xD), y desde que me empezaron a asustar (a una corta edad), me contaba sus experiencias para normales. Tener ésa extrasensibilidad para ver algo que se encuentra en un plano más alejado del nuestro ha de ser fea, si no, pregúntenle a Marie si le gusta ver fantasmas.
Aunque creo que a la larga uno se acostumbra. En fin, ése mismo instante que hablé con mi papá sobre lo que le pasaba cuando era morro y le sigue pasando, pues sentí un escalofrío recorrer mi espina dorsal. No le tomé mucha importancia pero mi papá me dijo que sintió lo mismo (bueno, me dijo que sintió un escalofrío en la espalda... sin que yo le dijera que lo sentí), y eso si me hizo temblar aún más las nalguitas. Salí de mi casa y todo estaba bien oscuro y tétrico. Los perros no dejaban de aullar cuando me veían, y, al pasar por la calle de Silent Hill (el pollo, TJW y Yoh sabrán de que calle me refiero), sentí nuevamente ése escalofrío terrible. No escuché nada, pero sentía que alguien estaba atrás de mí. Por inerscia, volteé, pero no había nada. Me puse algo nervioso y comencé a cantar The Unforgiven II. No quería ver hacia el edificio abandonado que está enfrente de la escuela primaria, pero mi curiosidad me mató y volteé. Repito, yo no puedo ver nada de fantasmas, así que no vi nada. Pero lo que sentí fue muy horrible. Fue como si se me hubiera paralizado el cuerpo y no podía hacer nada. Sólo seguía cantando The Unforgiven II en mi cabeza, pero con miedo. Poco a poco me fui tranquilizando y pude caminar. Hasta sentí que podía respirar. De ahí me fui corriendo hacia el metro y ahí las cosas se tranquilizaron un poco. Cuando hay muchas personas esa sensibilidad que tengo (que es muy baja) parece desaparecer, o al menos concentro mi mente en más cosas. Bueno, llegué a CU y ahí si estaba algo solitario el paraje que tomo para legar a mi facultad. Nuevamente sentí el escalofrío, pero aumentado como unas diez veces. Pude caminar porque pensaba que iba a llegar tarde, más que nada yo ya quería distraer mi mente. Además, pude ver a varias personas caminar y cuando veo a alguien caminando enfrente de mí, instintivamente lo que quiero es rebasarles.
Ya, estando en el trabajo, como que en broma, le dije a Victor que iba a ver fantasmas o algo así. No sé cómo es que salió la platica, pero me comenzó a decir todas sus experiencias paranormales, y lo que le pasó en una sala del cine. Eso de ver a un niño salir de la pared de la sala y meterse en otra pared está muy denso. Lo más "grave" que me ha ocurrido ha sido escuchar una risa de una mujer joven. Aunque la risa era macabra, de cierta forma pensé que era la muerte.
Bueno, al salir del trabajo, estaba cargando el standee de Bourne: El Ultimatum. Me era difícil porque también cargaba la manta de la misma película (como no cabía en la mochila). Cuando llegué al hospital infantil, se me cayó el standee y escuché la risa jocosa de un niñito. Pensé "maldito chamaco burlón", pero después recapacité y vi la hora... era muy noche para que un niño estuviera caminando por las calles. Volteé y no había nada.
Corrí lo más rápido que pude y llegué a mi casa, donde sentí nuevamente el escalofrío.
La verdad yo si creo en eso de los fantasmas. No es porque yo haya visto uno, es porque he sentido y escuchado cosas. Aunque claro, las cosas creíbles, no como lo que una vez me legó a contar Benjamín, de ver demonios y ese tipo de cosas.
Aunque, ¿qué cosa es creíble cuando se habla de fantasmas.?
En fin, el jueves fue mi último día en el CAI, a partir de hoy estaré en el Carrito, entrando y saliendo de las salas para vender refrescos y palomitas. Mejor así, tengo varios descansos.
Y, con respecto a lo del título, ayer me fui de ebrio con los cuates de la escuela.
Mi mamá se enojó y esas cosas.
Ni modo D=.
Por cierto, ahora, estando aún con mi familia, el escalofrío se puede sentir más intenso... ¿eso será bueno? >_>